Importancia de conocer la definición, objetivos, finalidad, beneficios y fundamentos jurídicos del descarte o expurgo dentro del quehacer bibliotecario.
Ensayo.
En las bibliotecas los
flujos de información presentan cada vez mayor complejidad para su utilización
y localización, esto por la gran cantidad de productos informativos con que
cuentan, por ello se hace necesario realizar el descarte o expurgo que va más
allá de retirar la bibliografía que se considera obsoleta, implica primero que
nada y se hace necesario que todo el personal que labora en la misma, se le
capacite para que primero, reconozca e identifique su importancia, que objetivo
se persigue al realizarlo, su finalidad, beneficios y fundamentos jurídicos,
mismos que son motivo del tema a desarrollar.
Estos son términos
importantes ante todo, porque al recibir capacitación el personal que lo
realizará podrá definir lo que se persigue al realizar el proceso del descarte
o expurgo, lo que permite hacer conciencia, que se amplíen los conocimientos y
además se crea el compromiso por parte de ellos al realizarlo y con ello
cumplir con los objetivos del proceso y de la biblioteca, para con ello poder
contribuir a satisfacer las necesidades de información de los usuarios al
contar con material bibliográfico actual, adecuado, pertinente y que este a la
mano.

Teniendo identificado la importancia del porque el personal de la biblioteca debe conocer los términos mencionados, nos enfocaremos en definir y realizar el desglose de las aseveraciones sobre objetivo, finalidad, beneficios y fundamentos jurídicos del descarte o expurgo para que se genere una mejor comprensión y conocimiento de los mismos que permita ampliar la visión y punto de vista sobre la lectura analizada.
Considero que al ser una
biblioteca una entidad cultural con características específicas de su misión en
la comunidad, requiere de una constante actualización y dinamismo, tanto
en
los servicios que ofrece como en sus colecciones. Por ello en todo momento debe
mantener
una
tendencia definida y clara hacia la mejora, a fin de fortalecer el papel que le
corresponde como puerta a un mundo de conocimiento e
información, siempre con respuestas a las necesidades
informativas de sus usuarios.
Para lograr lo
anterior, un factor importante a considerar es el crecimiento y desarrollo
ordenado de las colecciones, pues ello repercute de manera directa en su
equilibrio temático y en la eficiencia de los servicios que ofrece.
También debe estar el personal capacitado y
preparado para reconocer el acervo que tienen y verificar si estos todavía
cumplen con las necesidades informativas de los usuarios o en caso contrario
paulatinamente estos irán ocupando un espacio innecesario, al ser material
desactualizado, deteriorado o carente de circulación; siendo necesario y
fundamental el darle espacio al material nuevo y actualizado.
En este sentido, se
hace necesario que los bibliotecarios reconozcan la necesidad del descarte o
expurgo al identificar perfectamente su proceso y así lograr la calidad y
actualidad de los materiales documentales, debiendo desarrollarse en base a una
metodología.
“El descarte de material bibliográfico es el proceso mediante el cual se armonizan los recursos bibliográficos existentes en una biblioteca con la política de desarrollo de colecciones que estipula los criterios de crecimiento”. (Gómez, 2002).
En base a lo establecido
por Gómez se puede decir que para que exista una adecuada armonización de los
recursos bibliográficos, es necesaria hacer una selección del material a
retirar de una colección, ya sea porque los libros se encuentran en una pobre condición
física o por su contenido obsoleto o porque no tienen valor de uso para una
comunidad de usuarios.
“La
evaluación de la colección tiene como fin determinar en qué medida la colección
responde a sus objetivos y a las necesidades de sus principales grupos de
usuarios” (ALA,1989).
Por lo
referido por la ALA, se puede decir que la realización correcta de la
evaluación de la colección permitirá a la biblioteca obtener información
objetiva y confiable para determinar si esta es acorde a los objetivos y si se
satisfacen las necesidades de información de los usuarios.

Se debe tener en cuenta para
llegar a una correcta realización del descarte o expurgo de material
bibliográfico, se debe contar con una amplia visión sobre el alcance de las
colecciones y conocimiento sobre el desarrollo que debe mantener para su
vigencia y equilibrio temático.
Llevar a cabo la actividad
del descarte debe hacerse en función de su objetivo, que debe estar relacionado
con el objetivo de la biblioteca, y este es la razón por la cual se está
realizando la acción, por eso se les debe proporcionar a los bibliotecarios
información suficiente para que los conozcan e identifiquen, pudiendo decir
entonces que la importancia de los objetivos reside en el hecho de que se sepa
cómo trabajar en tiempo y forma, así como identificar los resultados que se desean,
reconocerlos permitirá alcanzarlos al depurar su acervo adecuadamente para
poder brindar a los usuarios un servicio eficaz y dar paso al desarrollo de
servicios acordes a sus necesidades, cumpliendo así de manera satisfactoria con
sus objetivos.
En cuanto a su finalidad,
esta se da por las razones que dan origen a la realización del descarte o
expurgo y deben ser plenamente identificadas por el personal responsable de
realizarlo, estas razones son variadas, como:
Mantener las colecciones
depuradas.
Que tenga el tamaño físico
adecuado.
Contar con mayor
disponibilidad de espacio para las nuevas adquisiciones.
Mejorar la calidad del
servicio.
Satisfacer las necesidades
de información de los usuarios.
Lograr la actualización de
contenidos.
Ahorrar dinero.
Todo lo mencionado
previamente redunda en beneficios al usuario como al personal de la
biblioteca
al dar:
Facilidad y rapidez en el
acceso y recuperación de información.
Ahorro de tiempo tanto para
los bibliotecarios como para el usuario.
Aumento del espacio
disponible.
Funcionalidad del acervo.
Aumento en la circulación y
uso al ser más atractiva la colección.
Mejora de la calidad y
pertinencia de la colección.
Agilizar el acomodo
de los volúmenes.
Todas las Unidades de
Información de Universidades públicas, privadas o colegios deben contar con políticas de selección y
lineamientos que sirven de guía al realizar el descarte o expurgo y estos están
relacionados con los objetivos que persigue cada biblioteca e institución
conforme su programa o plan de estudios, logrando controlar el crecimiento de
la colección.
En el caso de las
bibliotecas públicas de México, estas proporcionan servicios a diferentes tipos
de personas, con diferentes intereses y necesidades de información, por ello se
debe realizar el descarte o expurgo con cierta frecuencia para evitar un
crecimiento inadecuado del material.
CONACULTA establece
“que, al no existir una normatividad federal u oficial específica para el
descarte bibliográfico definitivo, la Dirección General de Bibliotecas del
CONACULTA conjuntamente con las coordinaciones estatales y delegacionales, así
como los responsables de cada biblioteca, validarán su proceso mediante las
adecuaciones pertinentes en el marco legal previsto en los siguientes
documentos:
Ley General de Bienes
Nacionales.
Normas generales para
el registro, afectación, disposición final y baja de bienes muebles de la
Administración Pública Federal Centralizada.
Ley General de
Bibliotecas”.
(Citado
por CONACULTA, 2005)
En base a los fundamentos
jurídicos del CONACULTA se realiza el descarte o expurgo de las bibliotecas
públicas, por medio de su Dirección General de Bibliotecas que valida el
proceso, junto con las coordinaciones estatales y el director en turno de la
biblioteca, esto porque no existe una normatividad que sea oficial o federal y
como se sabe los bienes materiales con que cuentan o se retiran de las
bibliotecas públicas, son bienes de la nación, por tanto se consideran parte
del patrimonio nacional del país.

Es importante que
este proceso cuente con fundamentos jurídicos que rijan a todas las
bibliotecas, pero que se estipule y se permita autonomía al realizarlo,
responsabilizando a cada Unidad de Información, que se debe comprometer y dar a
conocer a todo el personal, generando conciencia de la importancia de
realizarlo conforme lo estipulan y determinan dichos fundamentos.
Como se puede ver se
explicó la importancia de realizar el descarte o expurgo de forma regular, el
cual es saludable para todas las Unidades de Información, porque es necesario retirar
la información que se considera no relevante y por tanto quedarse solo con
información que es adecuada y que logra satisfacer las necesidades de
información de los usuarios.
En lo personal
considero que para lograrlo es necesario derribar las barreras que provocan que
no se realice de forma adecuada, por ello es importante que el personal que
labora en la biblioteca y que se encarga de realizarlo debe contar con la
capacitación adecuada que permita un verdadero conocimiento de todo el proceso
del descarte o expurgo, lo que generara un compromiso para llevar a buen puerto
dicho cometido, beneficiando a los usuarios que podrán satisfacer sus
necesidades de información y además contar con una biblioteca que contenga
material actualizado y fácil de localizar.
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarConsidero falta considerar en la normatividad federal u oficial específica para el descarte bibliográfico definitivo, la Dirección General de Bibliotecas, el que hacer con el material para el descarte bibliográfico porque en ocasiones no se sabe que hacer con él, porque si lo envías a reciclar, lo regalas o lo quemas, te puede ocasionar problemas, por tal motivo debe existir un buen procedimiento que respalde a los bibliotecarios.
ResponderEliminarMe parece muy importantes los temas que tocas en este ensayo .Y un punto a considerar el comentario de Aida que me resulta controversial .
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